Alocinando

Hoy iban a traer los muebles, pero el transportista solo ha acertado a explicar que todavía estaba en Echalar. ¿Allá arriba? Sin indicar detalles, salvo "cuando un día se tuerce, pues se tuerce", ha quedado en acercarse el lunes. Pensando en los tres pisos que tiene que subir con una escalera sin ascensor, más apta para pies de niño que de camionero, en que hacía sol y apetecía comerse un helado, no he podido negarme. El lunes será otro lunes. Y de momento los 27 metros parecen estirarse y da hasta para volar un poco, siguiendo una vieja costumbre...