Conclusión: no se abrieron los cielos por más que lloviese kalimotxo, hubo más chatos que chateos, la música no era del spotifi y la red social era flexible y variable y como ahí, a ratos me preguntaba ¿Y yo ya le conozco/a? ¿De qué?
Hoy mi cuerpo se sienta ante el ordenador y mi cabeza le sigue a cierta distancia. Y la cuestión que se plantea es otra... ¿Quién dice que internet es peligrosa? Que engancha... Que prueben con un día off en Pamplona el 6 de julio y luego ya me dirán donde está el peligro...
Y que viva San Fermín, ala! Igual lo incluyo como amigo en Facebook. Y a esta gente que come churros también. Que son de frescos, de hoy.

Para hacer un bonito efecto cine mudo en las fotos basta un poco de gran angular y dejarse parte de la tapa puesta.
1 comentario:
Que texto y que foto.
Tu devota mane.
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